PRODUCCIÓN AUDIOVISUAL
Desarrollo de Proyecto
Cada historia puede ser contada de diferentes maneras; por eso integro lenguajes y técnicas diversas, valorizando cada fase del proceso creativo, tanto desde el punto de vista narrativo como técnico, tomando en consideración las necesidades de cada proyecto.
El proceso de diseño se desarrolla en estrecha colaboración con el cliente, acogiendo su visión y transformándola en una idea compartida. A través de la definición de un guion o una escaleta narrativa y técnica, construimos juntos las bases del proyecto, dando vida a un camino creativo coherente y significativo.
Rodaje
El rodaje es la segunda fase del proceso de desarrollo del proyecto. Para mí, es la etapa más divertida del proyecto, en la que el guion o escaleta se reelabora in situ, primero a través de una visita técnica que permite conocer el potencial real de la locación, pero también identificar las dificultades y puntos críticos a resolver, acogiendo los cambios e ideas nuevas que puedan surgir.
Post producción
La fase de postproducción está compuesta por tres etapas diferentes: montaje, corrección de color, color grading y diseño sonoro.
El montaje es una etapa crucial de la producción audiovisual, en la que se seleccionan, ordenan y combinan las tomas para construir una narrativa coherente, rítmica y expresiva. A menudo se define como la "tercera reescritura" del proyecto o del guion, y es el momento en que surgen nuevas ideas e intuiciones.
La corrección de color es el proceso técnico y creativo mediante el cual se equilibran y optimizan los colores de un video. El objetivo es lograr coherencia entre las distintas tomas y obtener una imagen neutra y fiel a la realidad.
El color grading es una etapa artística y creativa de la postproducción audiovisual, en la que se interviene en el aspecto cromático de las imágenes para definir la atmósfera visual y la identidad estética del proyecto.
Diseño sonoro
El diseño sonoro sería la última etapa del proceso de postproducción. Es el arte y la técnica de crear, modelar y estructurar el universo sonoro de un proyecto audiovisual. No se limita a insertar sonidos, sino que construye un paisaje auditivo coherente con la narración, capaz de intensificar las emociones, definir los espacios y dar profundidad a las imágenes.
En este contexto, el sonido se convierte en un lenguaje narrativo, capaz de evocar atmósferas, sugerir significados invisibles y guiar al espectador a través de la historia.